Antes que nada, daros la bienvenida a todos/as a este nuevo curso sobre la meditación y como integrarla en nuestra vida cotidiana.
He aquí algunos puntos importantes que surgieron en la sesión del jueves. Esperamos que os sean de utilidad:
“Integrar la meditación en la vida diaria es toda la base y el propósito de la meditación. La violencia, el estrés, los retos y las distracciones de la vida moderna hacen esta integración incluso más necesaria y urgente”.
Sogyal Rimpoché
Empezaremos viendo cual es la situación actual de nuestra mente.
El hecho es que estamos profundamente distraídos, con miles de pensamientos que agitan nuestra mente y la vuelven la causa de todo nuestro estrés, preocupación y malestar.
Esta agitación interna constante hace que sea muy difícil hacernos amigos de nosotros mismos. Con la práctica regular de la meditación aprendemos precisamente a eso: a hacernos amigos de nosotros mismos.
Esta “amistad” se va desarrollando conforme nos vamos abriendo, poco a poco, a todo lo que experimentamos con conciencia, paz y mucho humor.
Si tuviéramos que resaltar el punto crucial de la meditación, diríamos que meditar es soltar, dejar de hacer, dejar de forzar, dejar de agitar la mente. Cuando dejamos de manipular la mente, esta, por sí sola, recupera su estado natural de calma, paz y bienestar. De este estado natural de calma, surge un contento sin motivo.
Es bueno que en este momento recordemos lo que no es meditación:
Meditar no es dejar la mente en blanco.
Meditar no tiene que ver con quedar colgado en un estado de éxtasis.
Meditar no tiene que ver con luchar contra los pensamientos-emociones.